Titular.
_ Los Reyes Magos
están constipados
y cómo no hay quién haga el encargo
como todos los años…
Sus esposas bonachonas,
los han de reemplazar
y hacer el camino
de la navidad…
¡Qué calamidad!
Era imposible e impensable
que no haya Reyes Magos
como toda navidad
al llegar el mes de enero
tal cual, tradición natal...
Vendrán cabalgando, antes
de la fecha de salida
porque ellas no corren
y se dan más el postín
para llegar a su fin.
Para dejar su huella navideña
un sobrenombre han de dar:
“Melcocha, Batata y Gazpacha”
casi igual a sus esposos,
quienes son los de verdad.
Sus camellos como siempre
les indican el camino
porque ellas no conocen
ese sendero divino
seguido por una estrella divina.
Cargadas con cosas buenas
preparadas por ellas mismas:
En vez de mirra, centeno
en dulces de caramelo
por oro traen las tres
un sabroso batido de nuez
y de incienso, ¡nada de eso!
un rico pastel de anís
con castañas de aderezo.
Vestirán, bellas y hermosas
con trajes más a la moda.
Nada de pantalones bombachos
o camisones extra largos,
ellas lucen lindos vestidos
con accesorios y encajes,
unos sombreros de plumas
y anteojos reflectantes.
Al Niño Dios cantarán
alegres y animosas
villancicos navideños,
parrandas y panderetas
porque sus gordos maridos
-nada saben cantar-
y alegrar al Divino Niño
con sus canciones de amor,
al sonido de una pandereta
y el toque de un dulce tambor.
¿Quién sabe cómo saldrá?
¡Esta nueva aventura!
Nada debe detener
la llegada de los Reyes
porque el Niño Dios, espera,
espera también, sus presentes.
Autora.
_ Oneida Pérez “Ofly”
No hay comentarios:
Publicar un comentario